Los millennials hicieron que cagar volviera a ser cool

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Nuestros cuerpos no están diseñados para cagar en tronos de porcelana.

 Igual que los pañuelos desechables o los percheros. Ir al baño no es un acto muy glamoroso, pero ¿por qué habría de serlo? Sin embargo, un grupo de jóvenes ambiciosos están buscando formas más nuevas y cool de cagar.

«Dicen que la necesidad es la madre de los inventos, y mi madre estaba estreñida», dijo Bobby Edwards, el diseñador de Squatty Potty.

 

La mamá de Edwards padecía de estreñimiento crónico. «Cuando un terapeuta sugirió que probara un taburete para ayudarla a ponerse en cuclillas y evacuar, funcionó», explicó. Pero «la postura de no era muy parecida a la de una sentadilla natural. También le molestaba lo estorboso del taburete y siempre se tropezaba con él cuando iba al baño».

Entonces, Edwards decidió tomar cartas en el asunto y construyó lo que él describe como una pieza de mobiliario práctica y de buen gusto que permite al usuario una postura de cuclillas más natural. También se puede acomodar bajo el inodoro cuando no se utiliza. Y así nació el Squatty Potty, que probablemente has visto en comerciales de un unicornio que hace cacas de arcoíris.

Defecar en cuclillas no es ninguna idea revolucionaria. Durante siglos, en países como China e India han rechazado el diseño tradicional del inodoro occidental y prefieren una modesta hendidura de cerámica en el suelo del baño. Si eres occidental y has viajado al continente asiático sin estar bien informado, es probable que te hayas llevado una sorpresa la primera vez que entraste a un baño público para hacer tus necesidades. Los primeros minutos sientes que se están burlando de ti, luego respiras profundo y te echas una caca. Con la hebilla del cinturón alrededor de tus pies y el culo en el aire, vacías tus intestinos igual que lo hacían nuestros antepasados en ríos y hoyos de tierra pésimamente cavados.

 

Quizá dudes de las ventajas de un ángulo más inclinado a la hora de evacuar pero los beneficios de una buena postura al defecar son reales y la ciencia lo confirma. En tu colon hay un torcedura natural y flexible llamada el «músculo puborrectal», que sirve principalmente para la continencia. Sin él, nos cagaríamos en los pantalones a cada rato. El músculo puborrectal se relaja parcialmente cuando te sientas en la taza del baño pero cuando te pones en cuclillas se relaja por completo. Esto permite la expulsión total de las heces cuando cagas.

Tal vez no suena muy relevante pero toma en cuenta este estudio israelí realizado en 2003, donde los participantes llevaron registro de sus evacuaciones en varios diseños de retretes. Los investigadores descubrieron que «el tiempo necesario para evacuar y la cantidad de esfuerzo necesario se redujeron drásticamente en todos los voluntarios al evacuar en cuclillas en comparación con las dos posiciones sentadas». En otras palabras, si la eficiencia es lo tuyo, la mejor forma de vaciar tus intestinos es poniéndote en cuclillas.

El Squatty Potty es sin duda el nombre más grande en el diseño ergonómico de accesorios de aseo, pero no es el único en su clase: también está el Squat ‘n’ Go, el Welles Step y una línea de taburetes ergonómicos hechos por una empresa llamada EasyGopro, sólo por nombrar algunos.

Y también está Miki Agrawal, una empresaria canadiense que ha invertido en productos innombrables durante toda su trayectoria pública. La primera vez que salió en una primera plana fue gracias a THINX, una línea de ropa interior de lujo para usar durante la menstruación. Su último producto, el TUSHY, es un accesorio de bidé para inodoros occidentales que limpia tu trasero con un chorro de agua tibia. La página web de TUSHY incluye un blog de estilo de vida, llamado «The Posterior», y lemas del producto como, «por fin te secarás el trasero como te secas los ojos después de un concierto de Beyoncé».

El bidé, igual que el baño en cuclillas, también es un invento antiguo. Existe desde el siglo 17 y es omnipresente en muchas partes del mundo. Pero el objetivo de Agrawal es reimaginar el bidé, que para muchos sigue siendo una curiosidad europea.

«Somos la única marca que se posiciona como una forma de mejorar tu estilo de vida», dijo Monica Pereira, la CEO de Tushy. «Ahora, con TUSHY, me resulta difícil pensar en limpiar mi trasero con un papel y andar así todo el día, es una forma ineficaz de limpiarnos».

«Llegó la oportunidad de hablar de esos temas que a la gente no le gusta tocar, y la mejor forma de hacerlo es a través de la innovación», dijo Agrawal.

Y aunque el inodoro y el bidé no son nada nuevo, el objetivo de Edwards y Agrawal no es solo es sólo abrir paso a una nueva era de accesorios de baño, sino también a una nueva era del discurso sobre el baño.

«Hay otros productos que prometen beneficios muy prácticos, pero parecen más bien un dispositivo médico o una cosa muy clínica», dijo Pereira. «Conocemos nuestro mercado, entendemos a nuestros clientes, y no nos da miedo decir, ‘Sí, esto es algo de lo que te puedes reír’, y está bien, todos podemos divertirnos juntos y disfrutar de este hermoso producto».

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