María de los Ángeles Pineda Villa, esposa del exalcalde de Iguala, vinculada con la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa, seguirá bajo arraigo. Sin embargo, de obtenerse una orden de aprehensión contra ella no sería por los hechos violentos sucedidos en Iguala, informaron funcionarios de la PGR.
Tras cumplir 40 días bajo arraigo, la SEIDO (Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada) solicitó la ampliación de la medida cautelar por 20 días más para buscar más evidencias que permitan juzgar a Pineda Villa ante los tribunales.
Secuestro, delincuencia organizada, lavado de dinero son algunos de los delitos que se le imputan a Pineda Villa.
Este 16 de diciembre Pineda cumplía el plazo de vencimiento de los primeros días de arraigo. No obstante el procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, había asegurado que no hay posibilidades de que Pineda Villa sea puesta en libertad porque existen suficientes elementos en su contra.
El día de los hechos, María de los Ángeles Pineda Villa presentaba su segundo informe al frente del sistema Desarrollo Integral de la Familia (DIF, organización que tradicionalmente encabezan las primeras damas). Luego celebró con un baile organizado por su esposo. Versiones extraoficiales aseguran que en el evento se revelaría la intención de la mujer de suceder en el puesto a su marido.
El líder de Guerreros Unidos, Sidronio Casarrubias Salgado, señaló a María de los Ángeles Pineda como “la principal operadora de actividades delictivas desde la presidencia municipal» de Iguala, en complicidad con su esposo.