Autoridades mexicanas localizaron a 54 niños y adolescentes que sufrían explotación laboral en un campo agrícola del estado de Coahuila.
Funcionarios hallaron un predio en el municipio de Ramos Arizpe donde se encontraban laborando «54 menores de entre 8 y 17 años», dijo el gobierno de Coahuila en un comunicado.
El campo pertenece la empresa Prokarne y los menores, que provienen de otras regiones del país, se dedicaban a seleccionar y empacar legumbres en una de estas propiedades.
Los niños y jóvenes recibían un salario de 100 pesos diarios por jornadas de nueve horas de lunes a domingo, cuando trabajaban medio turno, según testimonios de las víctimas.
Cotidianamente recibían dos comidas, una a mediodía y otra al concluir la jornada de trabajo y durante sus horas laborales eran hidratados con agua con sal.
Los menores, la mayoría hombres, solo tenían dos baños con una ducha sin agua caliente y dormían en colchonetas ubicadas en el suelo en cobertizos aledaños a la empacadora.
El gobierno estatal señaló que las víctimas eran reclutadas a través de anuncios en los medios de comunicación y trasladados en camiones hasta Ramos Arizpe, una ciudad con un importante parque industrial situada a unos 280 km de la frontera con Estados Unidos.
Los menores fueron trasladados a un albergue estatal para recibir atención, mientras que tres hombres de 50, 39 y 36 años fueron detenidos por las autoridades por su posible responsabilidad en la explotación de los menores.
El gobierno mexicano calcula que hay más de dos millones de jornaleros en México que viven en condiciones de semiesclavitud, sin contrato ni prestaciones sociales y que, pese a la dureza de sus trabajos de hasta 10 horas, cobran en promedio entre 4 y 7 dólares diarios.