De acuerdo con un reciente reporte, en sólo un año, la administración actual casi iguala al total de bombardeos que se hicieron en ochos años de mandato de Barack Obama. El objetivo son grupos radicales islámicos.
Durante sus últimos dos años en el poder, el presidente Barack Obama aumentó de forma drástica la cantidad de ataques aéreos contra militantes islámicos en Somalia.
Sin embargo, las acciones llevadas a cabo por Donald Trump superan por mucho las de su antecesor.
Durante los primero diez meses de esta nueva administración, Estados Unidos ha lanzado al menos 25 ataques aéreos en Somalia, una tasa equivalente a siete veces el promedio mensual de Obama, de acuerdo con cifras que fueron proporcionadas a VICE News por la organización The Bureau of Investigative Journalism.
En pocas palabras: en apenas un año Trump casi llega a la misma cifra de ataques que realizó Obama en ocho años, que registró un total de 34.
“Este aumento es bastante grave”, dijo Jack Serle, quien se encarga de administrar el conjunto de datos de la guerra con drones en la organización.
El blanco principal de estos despliegues de fuerza militar ha sido el grupo Al-Shabaab, vinculado a Al Qaeda, el cual realizó en octubre uno de los atentados más letales en la historia de Somalia, dejando 358 muertos e hiriendo a otras 400 personas.
En marzo, Trump autorizó al ejército estadounidense asumir un papel más importante en Somalia para luchar junto a las fuerzas del gobierno local y las fuerzas de paz de la Unión Africana. Estas órdenes relajaron las restricciones para los militares, permitiendo a los comandantes en tierra moverse más rápido para realizar incursiones y misiones de bombardeo, lo cual podría poner en peligro vidas civiles, de acuerdo con algunos grupos de derechos humanos.
Los ataques aéreos de EE.UU. han matado al menos a 87 personas en lo que va del año, de acuerdo con información de The Bureau of Investigative Journalism. Durante el último año de Obama, el 2016, los ataques aéreos mataron a 204 personas.
Estados Unidos llevó a cabo tres ataques sólo el fin de semana pasado, uno de los cuales mató a un militante de Al-Shabaab que había sido visto «participando en ataques a un convoy estadounidense y somalí», dijo el Comando Africano en un comunicado.