La plataforma digital Spotify, que surgió como una aplicación para la reproducción de música vía streaming, quiere expandir los límites del negocio y, ¡Vender maquillaje!
Sí, sí, has leído bien, Spotify se lanza a vender productos de belleza. La compañía ha ido añadiendo poco a poco servicios asociados para hacer más atractiva su oferta de cara a potenciales suscriptores: primero los podcast, luego los contenidos de vídeo relacionado con la música y lo próximo va a ser vender merchandising.
Se rumora que Spotify tomó la decisión de convertirse en un destino de compras para sus usuarios, porque pretende atraer más y más artistas, quienes en su mayoría, cuentan con un producto o servicio que se pretende promocionen en la plataforma.
Un cambio que podría hacerles mucho dinero a los artistas y a las marcas, si resulta exitoso.