El proceso electoral que se llevará a cabo este año derivará en un incremento de la deuda y el déficit de varias entidades federativas, lo que pone aún más presión sobre sus finanzas públicas, aseguró Moody’s.
La calificadora subrayó que existen estados con débil comportamiento financiero en periodos electorales, que seguramente excederán los aumentos de deuda que presupuestaron para este año.
«Moody’s anticipa que Baja California Sur, Campeche, Colima, Guerrero, Michoacán y Sonora incrementarán sus niveles de deuda por hasta 15 por ciento, sobrepasando considerablemente el incremento promedio presupuestado del 5 por ciento considerado en sus presupuestos.
«En general, estos estados tienen una historia de débil control de deuda que se agudiza durante los periodos locales cada seis años», explicó.
El pronóstico de Moody’s es que los desequilibrios presupuestales resultantes de la menor recaudación de ingresos y gasto sostenido conducirán a esas entidades a contraer deudas una vez que concluyan las elecciones.
Aunque más limitado, agregó la calificadora, también existe riesgo de un incremento de la deuda vinculado a las elecciones en otros tres estados: Nuevo León, Querétaro y San Luis Potosí.
En todos los estados mencionados se llevarán a cabo elecciones para gobernador, mientras que en 17 entidades se elegirán autoridades municipales y 8 más renovarán sus congresos locales. Todas las entidades celebrarán elecciones federales para elegir diputados.