Guillermo Padrés, ex gobernador de Sonora del periodo 2009 a 2015, reapareció hoy y dijo que se entregará a las autoridades del país; después de haber sido buscado durante varias semanas por ser acusado de lavado de dinero. En agosto de este año, la Procuraduría General de la República decretó su detención por delitos del fuero común.
“No son correctas las acusaciones que se nos han venido acusando”, aseguró esta mañana durante una entrevista para el un programa de Radio Fórmula, justo antes de entregarse.
“Díganme de qué me acusan, díganme cuáles son los delitos que se me acusan y no se me informó”, añadió mientras se le veía más delgado y ojeroso, vistiendo un traje negro.
“Voy a enfrentar esto y voy a demostrar mi inocencia, la mala fe, la alevosía y ventaja que manejó la PGR”, dijo de firme voz el ex mandatario.
“Lo voy a enfrentar como lo pide la ciudadanía, que quiere que si somos culpables, paguemos por los delitos cometidos. En este caso no hay ningún delito. Tengo las pruebas fehacientes. Estoy seguro que la justicia federal va a valorar este acto, que yo vengo a presentarme. Me voy a trasladar a un penal [… ] a un juzgado. Es una persecución política per se. En esta guerra de partidos a mí es a quien han agarrado para emparejar los cartones”, expresó.
Acerca de la posibilidad de terminar en prisión, contestó: “lo entiendo muy bien, lo pondero muy bien, es muy duro para mí, para mi familia, pero es un acto de congruencia. Va a ser una lucha muy difícil, muy dolorosa, pero la tengo que hacer. Tengo mucha fe […] confió en que los jueces dejarán de lado los “temas políticos” y se abocarán a las pruebas que existen.”
El político sonorense mencionó que confía en su abogado Antonio Lozano Gracia, quien fue procurador durante el gobierno de Ernesto Zedillo.
Con información de aristeguinoticias.com/