La presidenta nacional del PRD, Alejandra Barrales, anunció que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) aprobó, por mayoría, el plan de austeridad que anunció la tarde del lunes.
Dicho plan incluye mudarse a la sede de Monterrey 50 y despedir a trabajadores “del personal político de confianza”, respetando, según dijo, sus derechos laborales.
Con ese planteamiento, mencionó, el partido reducirá sus gastos “arriba del 70%” y así podrá donar 25 millones de pesos a los damnificados por el sismo.
“El Comité Ejecutivo ratifica su voluntad de ser solidario y apoyar la situación de emergencia que están atravesando muchas familias mexicanas y para ello ratificamos nuestra disposición para poder hacer un esfuerzo de ahorros de recursos del partido y poder destinarlos al apoyo de todas estas familias de damnificados”, indicó en entrevista, después de concluir la reunión del CEN.
Ratificó que van a dejar la sede de Benjamín Franklin para mudarse a Monterrey 50, “lo cual –agregó– implicaría un ahorro importante para nuestro partido. Estamos hablando de cancelar el pago de la telefonía celular, a viáticos, a gastos de representación”, indicó. Lo ahorrado por ya no arrendar el inmueble serán destinados al llamado Fondo para la Reconstrucción Nacional.
Además, agregó, pedirán a los funcionarios perredistas una aportación de un mes de su salario.
También se reducirá en 60% el gasto para la nómina del personal de quienes conforman equipos políticos porque, agregó, “el PRD es el único partido que tiene un sindicato”.
Reiteró que, con estas medidas de austeridad, el PRD pretende donar 25 millones de pesos “y con ello contribuir de manera inmediata a la reconstrucción del país y asistencia a las víctimas”.
La dirigencia acordó que estos recursos serán vigilados por la ciudadanía para garantizar la transparencia y su correcto uso.