Estados Unidos indicó que es absurdo sugerir un movimiento armado, al tiempo que negó que sus aviones se desplacen por las costas de Corea del Norte
Como parte de las amenazas e insultos entre los presidentes de Estados Unidos y Corea del Norte, el ministro de Exteriores de la nación asiática, Ri Yong Ho, aseguró que el vecino país del norte les declaró la guerra luego de enviar aviones caza y bombarderos a volar alrededor de sus costas.
En respuesta a ello, Sarah Sanders, portavoz de la Casa Blanca, aclaró que en ningún momento se le declaró guerra a Corea del Norte, según diversos reportes de agencias de información, “Francamente, sugerir eso es absurdo”. “Nunca es apropiado que un país dispare contra las aeronaves de otro cuando se encuentran sobre aguas internacionales”, añadió.
Por su parte, el portavoz del Pentágono, Robert Manning, reiteró que las operaciones militares estadounidenses del fin de semana pasado se llevaron a cabo en espacio internacional, “tenemos derecho a volar, navegar y operar en cualquier parte del mundo donde esté legalmente permitido” sentenció.
Los funcionarios norteamericanos insistieron que el objetivo de la actual administración de Estados Unidos es lograr que Corea del Norte deje de lado su programa de armamento nuclear y no un altercado militar, sin embargo el Pentágono aseguró que está preparado para ofrecer opciones militares a Donald Trump, en caso de que Pyongyang continúe con sus acciones provocativas.
Luego de que Norteamérica incluyera a Corea del Norte dentro de un grupo de ocho naciones con restricciones para poder viajar a la Unión Americana; Corea del Sur sugirió que se eviten mayores escaladas de las tensiones entre ambos países ya que es probable que de continuar con las provocaciones se inicien los choques militares que pueden salirse rápidamente de control.
Asimismo, el gobierno de Rusia ha suscitado numerosos pronunciamientos a favor de la calma, en tanto, diversos funcionarios reconocieron que existe un ambiente de tensión, además de que se comparó la situación con una pelea de jardín de niños, y se llamó a un enfoque racional y no emocional.